Colombia sería el segundo país suramericano en legalizar la marihuana para usos medicinales, después de Uruguay (donde también se permite el uso recreativo), si prospera el proyecto de ley liderado por el senador liberal y presidente de la Comisión Primera, Juan Manuel Galán.
El congresista basa su propuesta en estudios científicos, según los cuales la marihuana disminuye el dolor en pacientes crónicos. “Vamos a promover este debate en el marco de que el Partido Liberal tiene que promover las ideas libertarias y progresistas”.
La marihuana se compone de varias sustancias. Conocida científicamente como cannabis sativa, una herbácea de la familia Cannabaceae, su principal sustancia psicoactiva es el tetrahidrocannabicol (THC), aunque tiene unos 480 compuestos en total, de ellos unos 60 con efectos, el THC y el CBD son los mayoritariamente acumulados, este último no psicoactivo.
El cannabis medicinal se recomienda como base de terapia para aliviar el dolor en pacientes con enfermedades como el glaucoma y otras en condición terminal, especialmente cánceres.
Según el médico Juan Fernando Chaustre Flórez, médico de Cúcuta que ejerce en el Centro de Salud de Aguaclara, de Tuluá, Valle del Cauca, está demostrado que la marihuana alivia el dolor en pacientes oncológicos terminales.
Agrega que otras investigaciones comprueban que el uso del cannabis retarda la progresión de males como la encefalomielitis o el síndrome de Tourette, trastorno neurosiquiátrico que inicia en la infancia y genera múltiples tic físicos y vocales.
La marihuana también ha funcionado como broncodilatadora en pacientes asmáticos y como coadyuvante en el manejo de adicciones a la heroína, al cigarrillo y a la cocaína.
División entre los médicos
Conocedores de esas propiedades los científicos empezaron a opinar tan pronto surgió la discusión política. El médico Chaustre, por ejemplo, recuerda que para nadie puede ser desconocido el uso de sicofármacos como la marihuana o el ácido lisérgico (LSD) en tratamientos médicos o siquiátricos.
“La marihuana se ha venido usando en estudios y se ha probado en varios países para ciertas enfermedades como el glaucoma, en pacientes oncológicos terminales para sus terapias paliativas, para mejorar el sueño y la depresión”, dice el especialista.
Y cita de hecho el último estudio que hizo el Instituto de Salud en California (EE. UU.) que demostró que se redujo en un 25 % la tasa de mortalidad por suicidio en jóvenes entre los 19 y los 40 años, desde que inició la legalización de la marihuana”.
Chaustre considera que se debe dejar de ver las drogas como un tabú y empezar a apreciar la parte práctica de estas sustancias, para usarlas de buena forma en pro de la medicina. Por eso, está de acuerdo con la legalización de la marihuana para usos médicos.
Efectos contraproducentes
Para el director de ‘Vida, afecto, mente’ (centro de profesionales), el médico siquiatra Mario Parra, “todavía no estamos preparados para usar la marihuana como tratamiento medicinal. No estoy de acuerdo con ese proyecto de ley, porque los estudios sobre el tema todavía son muy vagos, además, hay medicamentos especiales que cumplen un efecto positivo en pacientes terminales, no veo la necesidad de legalizarla y porque tiene efectos contraproducentes”.
Cuando las personas fuman marihuana tienen mayor contacto con los componentes, porque el humo es conservado por mayor tiempo, así que tienen más probabilidad de contraer cáncer de pulmón o de laringe y lengua; ese sería un efecto indirecto de su uso médico, explica Parra.
Otros efectos negativos produce el THC, que es la sustancia de la marihuana que genera relajación y también la posibilidad curativa, cuando se usa de manera crónica: baja la atención y causa menor coordinación y equilibrio, pues se concentra en el cerebelo, zona del cerebro encargada de esas funciones.
La THC a largo plazo también se va concentrando en el hipocampo, área del cerebro encargada de la atención. “Estas personas tendrán problemas de memoria. Sin embargo, hay una discusión porque algunos estudios muestran que cuando los adictos dejan de consumir marihuana, entre uno y dos meses después recuperan las acciones cognitivas y la memoria que habían perdido por efectos del uso”, afirma el médico psiquiatra.
Asimismo, según Parra, el uso crónico de marihuana predispone a enfermedades mentales, como la ansiedad. “Hay un efecto que me preocupa bastante: que el uso permanente de la marihuana puede predisponer a la esquizofrenia a personas que están expuestas a sufrirla por antecedentes familiares, el consumo acelera la enfermedad”.
Así los puntos de vista entre los médicos están divididos: mientras algunos piden dejar el tabú frente al uso de la cannabis para propósitos medicinales, otros piensan que es prioritario controlar el cultivo. Al final, serán necesarios más estudios, científicos, médicos y sociales, sobre si los efectos positivos resultan ser más que los problemas que genere un uso legal de la marihuana.
Cómo se administra
Existen diferentes métodos para la administración medicinal de la marihuana: vaporizar o fumar los cogollos de la planta, beber o comer extractos de la planta, aplicada en ungüentos sobre la piel o tomándola en pastillas sintéticas. La distribución se debe hacer de acuerdo con las leyes de cada país y bajo prescripción médica.
No radical
Carlos Gómez, director del Departamento de Epidemiología Clínica y Bioestadística, advierte que el debate no debe ser sobre el uso o no de la marihuana con fines médicos.
El debate, insiste, está en que no se puede aceptar el cultivo en todo el país bajo el pretexto de usos médicos. “¿Qué vamos a hacer con la sobreproducción de marihuana?, ese es el detalle que nadie ha contemplado. Creo que con pocas cuadras sembradas se alimentaría toda la necesidad médica del país”.
FUENTE: http://www.elpais.com.co/elpais/colombia/noticias/marihuana-hierba-danina-o-medicinal
Comentarios recientes